«Las noches aquí implican miedo, lidiar con situaciones violentas, no dormir…». La comisión de Feminismos desiste a seguir pasando las noches en el campamento porque asegura que se están produciendo «agresiones sexuales, xenófobas y racistas».
Una de sus portavoces ha especificado que estas agresiones incluyen «tocamientos, abusos e intimidaciones». Sin embargo, han aclarado que, a pesar de dejar de pernoctar en la plaza, seguirán vinculadas a la causa porque siguen creyendo en el movimiento 15-M. «Estaremos aquí de cara a un posible desalojo. Asumimos lo positivo y lo negativo, no nos desvinculamos», ha concluido.
Contrariedades
Las fuerzas empiezan a flaquear en Sol, un campamento que cada vez se parece más a una batalla campal y no solo por el aumento de la violencia. La falta de consenso y los eternos dimes y diretes de las Asambleas, que lejos de aclarar y aprobar propuestas generan más debate y réplicas entre las diferentes comisiones, suponen una clara muestra de que el campamento está viviendo su último aliento.
La Asamblea general del miércoles fue pospuesta una hora, de las 20.00 a las 21.00, y finalmente suspendida por «problemas técnicos» con la megafonía, según un portavoz, y por «descoordinación interna», según otro. En la Asamblea general de este jueves el portavoz ha especificado que «no se suspendió por problemas con la megafonía». Reticente a explicar los motivos; «no viene a cuento», ha dicho, varias personas se lo han exigido. Un responsable de sonido ha asegurado que «estaban trabajando en la reestructuración del cableado».
Lo cierto, es que resulta prácticamente imposible que dos portavoces respondan lo mismo a una única pregunta. La falta de comunicación entre las comisiones, los portavoces de estas y los propios organizadores de la Asamblea han terminado de generar el caos en un asentamiento que, a medida que pasan las horas, es más inoportuno.
¿Irse o quedarse?
La permanencia es insostenible y los propios ‘indignados’ son conscientes de ello. Desde el pasado lunes intentan consensuar los puntos de la reestructuración del campamento, pero han caído en su propia trampa. La unanimidad exigida para aprobar cualquier propuesta en Asamblea les impide llevar a cabo su tardía retirada.
Y es que hecha la ley, hecha la trampa. Apenas 150 personas, según fuentes policiales, siguen pernoctando cada noche en el kilómetro cero. Son los más reticentes a abandonar el barco. Lejos de desaparecer, parece que, si no modifican las reglas del juego, el campamento va a echar raíces.
Lejos de debatir los puntos de la reestructuración, la Asamblea general ha estado dedicada en cuerpo y alma a recordar, otra vez, el sentimiento de la revolución. «Estamos aquí porque no estamos de acuerdo con nuestro sistema político y exigimos un cambio, estamos aquí para construir un consenso, una idea nueva», ha reflexionado la portavoz de ‘Pensamiento’. Aunque lo cierto es que no ha llegado a buen puerto nada de nada. Cada una de las comisiones ha explicado su función y se ha limitado a expresarse a favor o en contra de la reestructuración y posible desmantelamiento del campamento.
Entre los fervientes de mantenerse acantonados de manera indefinida destacan las comisiones de Alimentación, que una vez más ha expresado su disconformidad con la idea de reducir el espacio de la acampada. «Rechazamos una reducción de las comisiones. Entendemos por reestructurar una mejora, en ningún caso reducir», ha expuesto su portavoz.
La comisión de Política ha apoyado a ‘Alimentación’ y ha abogado por no levantarse. «Bajo ningún concepto se acepta la reestructuración. Dicen los de ‘Información’ que se tramitará en el ayuntamiento su barracón. Nosotros no creemos en las fronteras y el barracón lo sería», ha explicado uno de sus portavoces. Aludiendo al problema de inseguridad, que se extiende por momentos, la comisión de Política a largo plazo se ha mostrado rotundamente en contra de la retirada de las comisiones del kilómetro cero porque «dejarían a los acampados en una situación frágil que tendería a la criminalización».
Entre los que creen que ha llegado la hora de levantar el chiringuito están las comisiones de Biblioteca, Sanidad, Feminismos y Migración y movilidad. Estos últimos han propuesto abandonar Sol este domingo y difundir el lema: «Nos vamos pero sabemos el camino de vuelta a Sol». Además, han considerado «peligroso» establecer un punto fijo de información en la plaza. «Son pocas personas y no descartamos un desalojo policial. Hay que perder el miedo a crear una nueva fuerza sociopolítica que no esté en Sol», ha dicho su portavoz.
vía La comisión de feminismo de Sol denuncia ‘agresiones sexuales’ | Madrid | elmundo.es.